Recuperados dos cuerpos y parte del helicóptero militar siniestrado en aguas canarias.


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Los cadáveres de dos de los cuatro militares fallecidos en el accidente del helicóptero del Servicio Aéreo de Rescate (SAR) siniestrado en aguas canarias el pasado 19 de marzo han sido recuperados, junto con gran parte de la aeronave, según ha informado el Ministerio de Defensa en un comunicado. El buque de Acción Marítima Meteoro de la Armada española está trasladando los cuerpos rescatados a Las Palmas de Gran Canaria, donde será practicada la autopsia en el Instituto Anatómico forense de Las Palmas. Los cuerpos fueron rescatados por el submarino del buque "EDT Ares" de la empresa Phoenix International tras las maniobras de izado del helicóptero, que se encuentra sumergido a 2.362 metros de profundidad, durante las cuales se han desprendido algunos elementos de la cabina. Los cuerpos y parte del aparato recuperados esta tarde son consecuencia del accidente del helicóptero del Servicio Aéreo de Rescate que se hundió en el Atlántico el pasado 19 de marzo con cuatro militares a bordo entre Gran Canaria y Fuerteventura. 

La empresa Phoenix Internacional, especializada en este tipo de rescates y a la que el Ministerio de Defensa adjudicó la operación, ha sido la que ha efectuado el izado del helicóptero y la que localizó el aparato el pasado domingo a unas 30 millas náuticas (55,5 kilómetros) al suroeste de Fuerteventura. La operación ha costado al Estado 3,2 millones de euros según ha sido publicado en el Boletín Oficial del Estado de hoy, una cantidad que para la Delegación del Gobierno de Canarias sería un contrasentido no pagarla porque sirve para rescatar a personas que han dedicado su vida a salvar a otras entrenándose en las condiciones más adversas. Todos entendemos que se rescate y no se abandone a estos militares, que fallecieron cuando realizaban un entrenamiento nocturno de auxilio a un barco de la Armada, ha señalado la Delegada del Gobierno en Canarias, María del Carmen Hernández Bento, quien ha opinado que no es una cuestión de dinero: no tiene precio. 

 La familia del militar desaparecido considera la localización de los restos "un alivio" 
La familia del teniente natural de Chiclana Sebastián Ruiz Galván, desaparecido tras el accidente de un helicóptero militar en Gran Canaria el pasado mes de marzo, reconoce que el hecho de que se haya localizado el helicóptero en el que se encuentran los restos de los militares desaparecidos ha sido un alivio y lo considera una buena noticia dentro de la tragedia que ha supuesto el accidente. Así lo indica en declaraciones Sebastián Ruiz, padre del teniente chiclanero desaparecido. Ruiz manifiesta que la empresa que se ha contratado para las labores de búsqueda del aparato "ha demostrado ser la mejor, y lo que hay que hacer es dejarla trabajar y, si todo va bien, con un poco de suerte esta noche o este martes se puede producir por fin el rescate definitivo del aparato". Eso es lo que queremos y hay que esperar, no queda otra, asevera, al tiempo que señala que la familia ya tiene la tranquilidad de que el cuerpo de Ruiz está localizado. Asimismo, manifiesta que "el tiempo sigue siendo importante, pero aunque suene raro ha merecido la pena la espera en la búsqueda porque se ha logrado el objetivo de encontrar el cuerpo"

No obstante, resalta que "aunque la familia esté más tranquila, cuanto antes se rescate el cuerpo, mejor". Respecto a las causas del accidente, Ruiz expone que "normalmente, en cualquier accidente de aviación puede haber una causa pero también pueden ser varias, y hasta que no se recupere el helicóptero no se sabrá lo que ocurrió o no se tendrá una hipótesis más cercana de lo que ocurrió". Además, destaca que lo que la familia desea primero es "que se rescaten los cuerpos y que a todos se le rindan honores como militares, se les celebre el funeral que merecen y se les brinde el reconocimiento como personas que eran" para después, una vez que descansen conocer "qué concluye la comisión de investigación, cuyos resultados la familia esperará expectante". El padre del militar chiclanero explica que conocer las razones del siniestro "es importante no sólo para saber qué paso, sino para que no vuelva a ocurrirle a otros compañeros que se siguen jugando la vida bajo las mismas condiciones". 

"La investigación requiere su tiempo y su metodología, y hay que esperar", afirma. Por último, desvela que la intención de la familia es llevar los restos del militar a Chiclana "y que descanse en su pueblo para tenerlo allí cerca y poder llevarle flores", agradeciendo "la solidaridad mostrada por todo el mundo tras tener conocimiento de la desgracia". Desde el accidente del helicóptero, continúan desaparecidos cuatro tripulantes: el capitán Daniel Pena Valiño, los tenientes Carmen Ortega Cortés y Ruiz Galván y el mecánico sargento Carlos Caramanzana Álvarez. El quinto tripulante, el sargento Johnander Ojeda, fue rescatado con vida a los pocos minutos del siniestro. El helicóptero siniestrado pertenece al 802 Escuadrón de Fuerzas Aéreas, con sede en Gando (Gran Canaria), y depende del Mando Aéreo de Canarias (MACAN). Se trata de un helicóptero conocido como 'Super Puma', una versión mayor y mejorada del SA 330 Puma, que, entre otras misiones, ha estado desplegado en Heart (Afganistán). 


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